12/5/11

Cieguismo

Ayer iba en el Sarmiento, sentada en uno de los asientos que están cerca de la puerta.
Venía medio dormida, cuando en Ramos Mejía me despierta un golpe. Una piba joven, de mi edad, se abría paso entre los asientos a las patadas. Se acomoda entre mi asiento y el de enfrente. Al ratito me toca el hombro y me dice "ay, ¿no le das el asiento?" y me señala a una mina que me parecía normal, pero a la que enseguida le ví en bastón blanco. El tren estaba tan lleno que era obvio que no podía irse hasta los asientos reservados, así que salté de mi cómodo asientito y se lo dí sin ofrecer sesistencia.
Como no podía acomodarme en el pasillo de lo lleno de gente que estaba, me quedé entre los asientos como la chica. Me molestaba demasiado la mochila, así que la puse en un gancho para ese propósito que estaba el lado de la chica.
Ella me miró con tremenda cara de orto porque la mochila le tocaba su precioso pelo. Cuando la miré para que me explique cuál era su problema, desvió la mirada.
En la siguiente estación se baja el tipo que estaba sentado enfrente. Ella se adelanta a mí y se sienta.

Quizás peco de exagerada, pero... ¿no me correspondía ese asiento a mí? Si yo había cedido el mío, ¿no es cortesía común dejarme el siguiente asiento que se desocupe? Porque, además... ¡fue ella quien me lo pidió!
Me quedé bastante molesta mientras ella dormitaba como la princesita que es.
Ella cruzaba y estiraba las piernas cómodamente  y me pegaba patadas. Mefistófeles quiso salir, pero no lo dejé y lo mandé a su cuarto.
Cuando por fin llegamos a Once, me acerco para decirle a la ciega que espere a que salga toda la gente del tren antes de salir, porque estaba muy lleno y podían golpearla. Pero La princesita le dice primero "¿necesitás que te ayude?" "bueno, dale, ¡gracias!" dice la ciega mientras la toma del brazo.
La Ciega y la Princesa iban caminando charleteando mientras yo imaginaba a la Princesa en su oficina, contándole a los compañeros lo que hizo; sacando la conversación lo más disimuladamente posible: "ay, hoy el tren estaba re-lleno, pero re-lleno. Tuve que pedir el asiento para una no-vidente de lo lleno que estaba" (las personas como ella no dicen "ciego", dicen "no-vidente") "ay, y después la ayudé a salir del tren... re-simpática, ¡no sabés como hablaba!" (a las personas como ella les sorprende que los ciegos hablen, hagan chistes, coman solos y se peinen).
Pero claro, nunca va a contar lo perra que se mostró con una persona con capacidades mediocres como yo, el verdulero y Julian Weich.

12 comentarios:

Sil dijo...

Jajajajajajaja la gente que parada grita desesperadamente por un asiento es la última en cederlo si está sentada. ES LEY

valeseo dijo...

Te escribí un montón y se me borro..puff!!

Te preguntaba como haces para retener y después plasmar tantos pensamientos, movimientos, diálogos... Yo he tenido muchas situaciones así pero ampliamente la que nunca pude olvidar fue la de una mina que a las 7 de la mañana viajaba en subte, toda pintarrajeada e iba sacándose tranquilamente los bigotes con una pinza de depilar... asquerosisimo!

Ana dijo...

Yo no hubiera resistido hacer un comentario o encajarle mas fuerte la mochila!!

Sil dijo...

Ah maldita seaaa no me digas que se borro mi comentario de acá también!
Blogger puto...

Anabella dijo...

Mechi, hace unos post vengo leyendo tu blog. El viajar es un placer que nos suele suceder en los trenes de la ciudad muchos ogros te encontrarás.
He tenido varias experiencias, uno muy molesta ayer de una señora que aspiraba su moco haciendo un ruido insoportable, se ve que no teñía carilinas. Otra de una que hablaba a los gritos sobre si llevar ojotas o no a Madrid. Y la mejor una señora hablando de su desayuno con gnoquis. Lo potable es reconvertir eso en historias, la princesa podrá contar todo eso, pero todos saben que vive en un falso reino, que en realidad es más bruja que princesa y todos sus espejos son muy mentirosos.
Saludos
http://armandomundos.blogspot.com
http://anicoc-ina.blogspot.com

Anónimo dijo...

Mechi,
la princesa podrá contar todo eso, pero todos saben que su reino es de mentira, que es más bruja que princesa y todos sus espejos son muy mentirosos.
A mi ayer me tocó viajar al lado de una señora que aspiraba sus mocos...se ve que no tenía para sonarse...re tierna ¿?
Te paso mi dos blog, uno está viejito y el otro arrancando
Saludos, Anabella
http://anicoc-ina.blogspot.com
http://armandomundos.blogspot.com

Anónimo dijo...

Moraleja: Un ciego felizmente no puede apreciar con facilidad la obsecuencia humana.

Moraleja 2: Un No ciego es capaz de dejarce agradecer por tratar a un ciego con humanidad.

Ruben dijo...

Pero tu conciencia está tranquila, yo hubiese discutido un rato, por tocar las narices más que nada. Nunca había oído lo de no-ciegos, siempre se les dice por aquí "invidentes".

TBO "Zipi y Zape":
Zipi: haz bien sin mirar a quién.
Zape: Pero si haces bien sin mirar a quién, puede que te sacudan a base de bien.

Mechicabota dijo...

Sil: Se borraron todos los comentarios. Llegué a leerlos todos, pero se borraron =( en teoría vuelven este fin de semana a más tardar.

Anónimo: Mejor dicho, imposible.

Ruben: Jajaja, genial lo de "Zipi y Zape". Acá cualquier palabra que hable de discapacitados, eventualmente queda mal vista, de "discapacitados" pasamos a "personas con capacidades especiales" o "personas con habilidades diferentes", de "ciego" pasamos a "no-vidente", de "sordo" a "hipoacúsico". Es como una discriminación a la inversa, me enferma.

Sofi Mai dijo...

Mefistófeles sabe lo que hace mujer , yo que vos la próxima le dejo meter la cola aunque sea un poquito , a ver si empezamos a avivar a los giles ;)



PD: cómo es eso de que los comentarios "vuelven este fin de semana a más tardar" !??! se fueron de vacaciones pero ya están pegando la vuelta ? jajaja

Leonel Javier Ciliberto dijo...

Excelente.
Acá si estoy de acuerdo.
Está lleno de heroes hoy en día. Ante una sociedad tan mediocre, ellos creen ganarse el cielo con esas actitudes. Pero ante el igual, son competidores. Son buenos con el ciego porque lo consideran inferior, no porque emerja de ellos una empatía sin precedentes. Pero con quien ve, siguen manteniendo un salvajismo asqueroso.
Mediocres. Así se llaman.

Prof. Sofia Prediger dijo...

No puedo dejar de leer! casi nunca comento tantos post seguidos. Tengo una amiga ciega y siempre me comenta eso de que los príncipes y princesas de esta sociedad hipócrita la tratan de no-vidente, ella se ríe, diciéndome: "¿uds. son videntes acaso?", todos somos clarividentes ahora... otra que Ludovica Squirru.
Tiene una columna de discapacidad en Visión 7, en la Tv Pública. Muchos se sorprenden de que tenga dos títulos y trabaje como periodista que es. ¿Qué le pasa a la gente? Felicito tus reflexiones. Hasta lueguito.